Poticamelleando con Pitty

¡Hola guapas! ¿Qué tal?

Hoy os traigo una entradita súper especial para mí porque vengo a enseñaros un paquetito repleto de cositas que me mandó nuestra estupenda y maravillosa Pitty, que supongo que todas conoceréis, a raíz de un intercambio que hicimos. Ya le he dado las gracias mil veces, pero siento que siempre me quedo corta, así que aprovecho para agradecérselo de nuevo de todo corazón.

Bueno... ¿Os apetece ver ya qué contenía el paquetito? ¡Seguidme!

Lo primero y más importante, ya que es la razón de este experimento "poticamellil", es esta Paleta de 36 Sombras de H&M.

En realidad es una paleta con historia porque llevaba mucho tiempo viéndola en la tienda y me llamaba mucho la atención, pero nunca me decidía a comprarla y un día no sé qué pasó, pero Pitty se empeñó en que se me antojase y cuando digo que se empeñó no miento, porque incluso realizó este precioso look para convencerme de que me la comprase. El que caso es que al final gracias a ella, más que en un antojo se convirtió en una "necesidad", y vosotras sabéis lo que eso significa, pero ya no la encontraba en ninguno de los dos H&M que tengo aquí, así que ella se ofreció a pillármela y enviármela. (Y colorín colorado, este cuento se ha acabado jaja).

Bueno, ahora que conocéis "la leyenda de la paleta", vamos a analizarla un poquito más a fondo, ¿vale?

Como véis, se trata de una paleta hecha de plástico cuya base es de color negro y su tapa es transparente, lo que la hace muy práctica porque nos permite ver los tonos de las sombras sin necesidad de abrirla. Además, tiene el tamaño perfecto para llevársela de viaje, ya que es muy compacta.

Contiene 36 sombras rectangulares de 0,85 gramos cada una cuyos tonos van desde los marrones y los beigs más neutros hasta los azules y los verdes más atrevidos, pasando por los rositas y los morados.

Entre los acabados encontramos tanto sombras mates como shimmer, aunque éstas últimas abundan mucho más que las otras, pero para mí esto no supone un problema porque no son para nada exageradas y se pueden utilizar perfectamente en looks de diario. Además, que tampoco me importa utilizar una sombra shimmer, siempre y cuando no sea muy cantosa, a las diez de la mañana.

Por otro lado, en cuanto a la pigmentación, hay sombras que pigmentan más y otras menos, pero por lo general están bastante bien. En la foto que tenéis aquí abajo solo he swatcheado unas cuantas aleatoriamente porque si os pongo el swatch de cada una me da el lío.

De la duración no os puedo decir mucho porque yo siempre utilizo prebase, pero supongo que tampoco andarán mal en ese punto. Además, no son sombras demasiado tizosas y se trabajan de maravilla.

Las sombras tienen una caducidad de doce meses y el precio de la paleta es de 6,95€, así que si os gusta y queréis tener una paletita vérsatil y compacta, os la recomiendo, pero eso sí, corred porque me da que la están retirando.

Ups... Creo que me he extendido un poco hablando de la paletita, pero prometo ser más breve con lo que viene a continuación.

Bueno, lo siguiente que me encontré en el sobre fue este Gloss de Yes Love en el tono 03, un rosita totalmente mate precioso que me encantó. De hecho, ya le había echado el ojo.

El envase es bastante pequeñito, ideal para llevar en el bolso, y el aplicador que trae es de esponjita.

Tiene un olor agradable y no es para nada pegajoso. Además, deja un colorcito en los labios muy bonito.

También me encontré estos dos Perfiladores de Labios, uno de Deliplus y otro de Carlo di Roma.

El de Deliplus ya lo tenía y os hablé de él aquí, pero me ha encantado que me llegase otro porque lo utilizo un montón. De hecho, cuando me lo compré volví a por otro de repuesto, pero ya no quedaba.

El de Carlo di Roma me ha encantado porque, además de que me encantan los perfiladores de esta marca porque son bastante cremosos y duraderos, tiene un tono precioso que voy a utilizar mucho este invierno, incluso como labial.

Ahora vamos con lo que era un Cuarteto de Sombras de Carlo di Roma en tonos turquesas y digo era porque podéis ver en qué estado llegó a mis manos, pero de esto no tiene la culpa ni Pitty ni Correos, sino una vecina graciosa que me abrió el paquete y lo tiró al suelo al ponerse nerviosa cuando esuchó que venía alguien. Menos mal que ese alguien era mi madre, que bajó cinco minutos después de que pegase el cartero, pero por desgracia no pudo pillarla. La suerte es que, afortunadamente, no me falta nada.

Me imagino que el cuarteto sería precioso, pero, como le dije a Pitty, tampoco me lo voy a tomar a mal porque al compactarlo me ha quedado un tono precioso, bastante especial y que pigmenta que da gusto. Hay que ser optimista, ¿no?

Y finalmente, en el sobrecito me encontré dos muestras de Manteca Corporal de Sephora que aún no he probado, pero que me muero por hacerlo, y una muestra de la fragancia Delirium de Mango cuyo olor me ha encantado.

¿Qué me decís? ¿Qué os han parecido las cositas? ¡A mí me ha encantado todo! Desde luego que cada día me alegro más de haberme inmiscuido en el mundo blogger y de que forméis parte de él chicas tan estupendas como Pitty. ¡Gracias por enésima vez, guapísima!

Y a vosotras...  ¿Os gusta el "poticamelleo"?

¡¡UN BESITO CHICAS!!

 ¡¡GRACIAS POR LEERME!!